domingo, 17 de marzo de 2013

"Y entonces, me descubrí, mirándome.
Allí estaba yo, en pie, justo en frente del espejo donde siempre te imaginaba.
Entonces tus formas, tenían el sentido perfecto, al compás que marcaba el movimiento de los velos que cubrían las ventanas. Como parte de un plan astutamente preparado, te imaginaba siempre con la cantidad justa de luz, la suficiente como para que yo, cualquier director de fotografía, pudiese componer el resto.
Me descubrí mirándome, y puse el empeño suficiente para descubrirme al detalle. Durante varios minutos, centré toda la atención en mis ojos, grandes, de tonos melosos, y fue entonces cuando por primera vez te descubrí en mí. 
Allí estabas tú, en cada movimiento, en cada parpadeo. Sorprendida, decidí continuar con la "auto-exploración", y en cada uno de los pasajes de mi cuerpo pude descubrirte, en algunos más escondido que en otros, pero en casi todos estabas bien presente.
¿Por qué estaba sucediendo?
¿Por qué prácticamente tú y yo formábamos un solo elemento? ¿Un solo ser?
Quizá te había idealizado tanto que "de a poquito" me fui componiendo contigo, hasta descubrir que yo estaba completamente hecha de pedacitos de ti."

viernes, 1 de marzo de 2013

"No sabes lo que tienes, hasta que lo pierdes"

¿Sabes por qué? ¿Por qué le quería?
Porque supo ver cosas de mí, que ni si quiera yo conocía. Haciendo que me sintiese por primera vez, lo más grande de este mundo. No era perfecta, por supuesto que no, pero él tampoco quería que yo lo fuese, adoraba cada uno de mis defectos. Le quería, porque desde el primer momento, me puso por encima de todo. Le daba igual lo que tuviese delante, para él, siempre sería yo. Me hacía sentir como si fuese un regalo en su vida. Le quise, porque rompió todos los pensamientos que tenía hasta ese momento, nunca me había creído eso de que alguien puede llegar a ser la razón por la que te levantas cada día, hasta que me dí cuenta, que desde hacía un tiempo, esa razón, había empezado a tener nombre en mi vida. Era todo tan..Increible, inimaginable. Era un juego, una competición, competíamos por ver quién quería más a quién. Pero tampoco hacía falta decirlo, nos sobraba el tiempo, las palabras, los besos, los abrazos. Era diferente, ninguno de los dos lo demostraba, pero ambos sabíamos que nadie llegaría a quererse tanto como nosotros. Nunca pedí que nadie lo entendiera, solo que entendieran la respuesta al "¿por qué le sigues queriendo? Después de tanto tiempo, después de todo".
Ahora sé que hay personas por las que das la vida, pase el tiempo que pase, su felicidad es tu felicidad. Porque ahora sé que es cierto el refrán de "no sabes valorar lo que tienes hasta que lo pierdes". Lo tenía todo, absolutamente todo lo que podía pedir, pero todos sabemos que cuando juegas te arriesgas, y si te arriesgas puedes ganar, o perder.
Perder, perdí todo lo que tenía, al que más me quería, al que mejor me trataba, sinceramente le perdí. Perdí la confianza que tenía con él, la que tenía conmigo misma.
Duele, duele recordar, abrir la caja, la caja de los recuerdos, la caja de cada una de nuestras cosas, de las que algún día fueron nuestras cosas...

"Dicen que cuando alguien desaparece de tu vida, puede que no vayas a volver a ver a esa persona nunca más, o que no vayas a poder decirle todas esas cosas que te gustaría. Entonces coges papel y lápiz, y escribes una carta, o una palabra, a esa persona que se fue, pero no la mandas. En vez de eso, la doblas, y la quemas. Así se la lleva el viento, y ese dolor no se queda tan dentro"

jueves, 28 de febrero de 2013

"Sarah se acerca y toma al chico de las manos. la diferencia de altura entre ellos es grande, pero no forman una pareja desequilibrada; muy al contrario, sus diferencias parecen complementarse, encajar como las piezas de un puzle. Instintivamente, Sarah echa un vistazo a su alrededor, queriendo comprobar que aún están solos, que no hay testigos, y entonces se besan. Es, en principio, un beso tímido, suave, casi etéreo. Pero pronto los labios se humedecen, y la carne se hace carne y la piel se hace piel. Se abrazan con fuerza, en un fugaz impulso de desesperación. Y el beso, y el abrazo, es largo e intenso. Cuando sus bocas se separan, cuando una pequeña parcela de aire acampa entre ellos, se miran. Y en sus ojos hay deseo y determinación. Cogidos de la mano salen de la habitación, y tras bajar dos tramos de escaleras, buscan un refugio, un oasis, un nido en el destartalado trastero abandonado, en el sillón polvoriento y ajado, en el que han tenido su paraíso particular"

"Poco a poco, la tarde se escapa entre los dedos y la noche coloniza. Los días son cada vez más cortos, el sol es cada vez más tímido, y sus rayos se debilitan, dejando el aire frío, y espero, como una embajada del invierno que se acerca. El sucio trastero, Joel y Sarah se besan, exhaustos y sudorosos.
-Te amo. Te amaré siempre -susurra ella al oído de él.
-Te amo yo también, pase lo que pase.
-Eres mi vida, mi corazón y mi cuerpo. Nunca me separarán de ti. Ni el odio ni la crueldad ni la muerte serán capaces de hacerlo. Has echado tus raíces en mi alma y nadie podrá jamás arrancarlas.
Se besan otra vez, largamente. 
Se visten en silencio, y cogidos de la mano, no importa quién pueda verlos, suben las escaleras de vuelta a casa, a ese pequeño y frágil hogar donde el amor calienta más que cualquier otro combustible"

jueves, 14 de febrero de 2013

ONE IN A MILLION

Hace poco, leí que con 50 años habremos conocido a lo largo de nuestra vida a unas veinte mil personas. Haciendo una regla de tres, obtuve que un/a joven de 17 años, habría conocido aproximadamente a 6800 personas. Pongamos, que la mitad de esas personas, es decir 3400, son hombres, y la otra mitad, mujeres…y supongamos que de esos 3400, solo un tercio están dentro del margen de edad en el que se incluyen todas las personas con las que podríamos tener una relación. Es decir, descartamos dos tercios, donde se encontrarían personas de las que nunca podríamos enamorarnos (familiares cercanos, ancianos…). Nos queda el siguiente número: 1133’3333… pero redondeando, pongamos unas mil. De todas esas personas, nos enamoraremos de una sola…estamos hablando de 1/1000. Y a su vez, esa persona, se enamorará de una sola entre 1000. De esta manera, la probabilidad de que la persona de la que uno se enamora sea precisamente la persona que se enamora de uno, es según las matemáticas 1/1000 x 1/1000, lo que es igual a una posibilidad entre 1.000.000. Así que, si se diera esa improbable situación de poder estar con la persona que quieres, si el destino ignorase 999.999 otras opciones y convirtiera esa probabilidad que había entre un millón, en un hecho, en una realidad…¿qué sentido tendría no aprovecharla? ¿qué más da lo que venga luego? ¿qué importa lo complicadas que sean las circunstancias? Si lo más difícil, lo que tenía una posibilidad entre un millón de ocurrir, ya ha ocurrido


lunes, 4 de febrero de 2013

Empieza todo a hacerse triste, a quedar del otro lado. Tú también lo prometiste, fuimos dos equivocados. Yo no pido casi nada, que se pierdan mis sentidos, y se nuble tu mirada. Pero el miedo nos consigue, se hace grande en estas manos. Mal recuerdo nos persigue, fuimos dos equivocados. No quiero escucharte, no insistas, prefiero esta vez encontrarte, inundando mis ojos esperando a que pase, a que caigamos otra vez. Y solo digo que nunca quise hacerte daño, pero todo se nos fue, y aunque somos como extraños, yo jamás te olvidaré.

domingo, 27 de enero de 2013

Lo nuestro no ha acabado, jamás ha acabado.

-Es hermoso lo que has hecho.
+Te prometí que lo haría.
-¿Por qué no me escribiste? ¿Por qué? No había terminado para mí. Te estuve esperando durante siete años, y ahora ya es tarde...
+Te escribí 365 cartas, todos los días durante un año.
-¿Me escribiste?
+Sí. Lo nuestro no ha acabado, jamás ha acabado.
-Esto no puede ser verdad, todo este tiempo, ¿ me he perdido esto?
-Hagámoslo otra vez.

martes, 15 de enero de 2013

Aprendí que quien no te busca, no te extraña, y quien no te extraña, no te quiere. Que el destino decide quien entra en tu vida, pero que tú decides quien se va y quien se queda. Que la verdad duele una sola vez, que la mentira duele siempre. Por eso, valora a quien te valora, y no tomes como prioridad a alguien para el que solo eres una opción. Aprendí que grandes amigos pueden hacerse desconocidos, y que desconocidos pueden volverse mejores amigos. Que nunca terminamos de conocer a una persona, que el "nunca más" nunca se cumple, y que el "para siempre" siempre termina. Que el que quiere puede, que el que no arriesga no pierde, pero tampoco gana.

lunes, 14 de enero de 2013

"Todos tenemos ese amor, por el que nos volveríamos a equivocar. Aquel que nunca hizo que se te acabaran tus ganas de arriesgar todo lo que eras y más. Ese ser, el dueño de la anatomía que te invitó a temblar. Cuerpo culpable de tantos pecados que no se dejan manifestar.
Ese amor, que jamás podrás olvidar.
Ese amor, que de una manera u otra siempre permanecerá.
Aquel que te agotó las fuerzas de salir a buscar.
Aquel que te agotó las ganas de volver a comenzar."

jueves, 3 de enero de 2013

Imposible, improbable.

La Real Academia define la palabra imposible como algo que no tiene facultad ni medios para llegar a ser, o suceder. Y define improbable como algo inverosímil, que no se funda en una razón prudente.
Puestos a escoger, a mí me gusta más la improbabilidad, que la imposibilidad. Como a todo el mundo, supongo. La improbabilidad duele menos, y deja un resquicio a la esperanza, a la épica.
"Que David ganara a Goliat, era improbable, pero sucedió. Un afroamericano habitando la casa blanca era improbable, pero sucedió. Que los Barón Rojo volvieran a tocar juntos era improbable, pero también sucedió. Nadal desbancando del número uno a Federer. Una periodista convertida en princesa. El 12-1 contra Malta".
El amor, las relaciones, los sentimientos, no se fundan en una razón prudente. Por eso no me gusta hablar de amores imposible, sino de amores improbables. Porque lo improbable es, por definición, probable. Lo que es casi seguro que no pase, puede pasar. Y mientras haya una posibilidad, media posibilidad entre mil millones de que pase, vale la pena intentarlo.

Sólo queda que aún te siento,

y que siempre te voy a recordar.

martes, 25 de diciembre de 2012

Claro que te echo de menos, pero no a ese que recuerdo como pasado, por el que llore, echo de menos con el que pasaba todas y cada una de mis tardes, el que me hacía sonreír con cada tontería que decía, a ese que hacía que me sintiera única, al que con un sencillo y simple te quiero, hacía que las mariposas arrasaran por mi estómago. A ese que creía en mí cuando ya casi nadie lo hacía, cuando el resto me decía que no lo iba a conseguir, a ese al que le daba brillo mi mirada, al que me hizo feliz como nadie, al que me hizo encontrarme después de estar tanto tiempo perdida, ese chico, el que era el motivo de todas mis sonrisas, reconozco que era genial levantarse todas las mañanas sabiendo que estaba con él, que no era un sueño. Pero lo que sí podía haber sido un sueño fue el tiempo en que le fallé, cuando mas confiaba en mí, cuando más me necesitaba fui yo, que le fallé una y otra vez. Le echo de menos. Echo de menos a ese "pp", ese, el que me hacía reír hasta cuando el mundo parecía derrumbarse por completo, el que era tan especial, el que de verdad me había tomado en serio... A él, le echo de menos.

"Querido, no tengas miedo, yo te he amado durante mil años, te amaré por mil más"
http://www.youtube.com/watch?v=rtOvBOTyX00